¿Un Nuevo Oscurantismo?

Numerosos hilos conforman el tejido de la civilización occidental, para entenderlo tenemos que pensar en cómo fueron entrelazados estos. Tenga en cuenta la influencia de la cultura griega, ya sea que fueran, la filosofía, la política o la arquitectura, las matemáticas o la medicina. A su vez, cuando los romanos conquistaron a los griegos agregaron su propia estampa. Sus ideas también nos han influido mucho: el concepto de imperio, el desarrollo de varios idiomas europeos a partir del latín, ciertas construcciones y prácticas de ingeniería, formas de administración, derecho y agricultura, todo esto procedente de la antigua Roma.

Revistiendo esta herencia grecorromana existe otra que ha sido objeto de gran cantidad de abuso en los últimos tiempos. La influencia de la Biblia dentro de la cultura occidental es bien conocida aunque se le rehúya con frecuencia. Sin embargo dio marco a algunos avances importantes dentro de algunos gobiernos progresistas, y a los derechos humanos con el tiempo, empezando por el rey anglosajón Alfredo el Grande. Quinto en la línea al trono, Alfred no esperaba ser rey. Sin embargo, se convertiría en uno de los más influyentes de todos los monarcas ingleses.

Alfredo consideraba que su pueblo estaba oprimido por la ignorancia y no tenía suficiente sabiduría para vivir según la voluntad de Dios. Preocupado, alentó a la nobleza para aprender a leer y escribir en inglés y ordenó la traducción de obras religiosas del latín. Al estudiar el libro de la ley escrita por Moisés, Alfredo inyectó sabiduría bíblica en el alma de su nación. Su codificación proporcionó la base de la jurisprudencia inglesa y la Carta Magna, cuyos principios fueron a su vez transferidos al Nuevo Mundo, convirtiéndose en fundamental a la Constitución de los Estados Unidos. Durante su reinado de 28 años, Alfredo rompió en parte la empuñadura de la Edad Media.

Es posible que actualmente estemos al borde de una época similar de ignorancia sobre las cosas bíblicas, otro tipo de Oscurantismo. Le pregunté al respetado autor y profesor universitario Craig Evans sobre el estado del conocimiento bíblico entre el público en general. Su respuesta fue preocupante: «No solamente con el público en general sino también en las congregaciones de las iglesias el analfabetismo bíblico es simplemente impresionante. Personas que se consideran a sí mismos como cristianos apenas se saben lo que está en las Escrituras».

«Hace una generación, usted podía asumir que el público en general tenía un entendimiento básico de la narrativa bíblica, la historia básica de la Biblia. Hoy en día no se puede afirmar lo dicho».

Craig Evans, Visión Entrevista, julio 2012

Al parecer en los últimos 150 años, incluso las verdades y valores básicos bíblicos han sido objeto de ataques en todos los frentes. Pensadores influyentes como Darwin, Marx y Freud han originado esas mentiras convincentes que la mayoría hoy en día no puede creer que la humanidad tuvo un Creador. En su lugar, se nos dice que el azar ciego y aleatorio nos engendró para que vivamos vidas desesperadas en competencia por la supervivencia, a merced de nuestra mente inconsciente. El escepticismo acerca de Dios y los valores absolutos están por todas partes. Entre tanto, como lo mencionó Evans, «el escéptico no sabe de lo que está hablando, lo triste del asunto es que muchos de los creyentes tampoco saben de lo que están hablando, así que es un dimes y diretes entre los dos grupos argumentando sobre cosas que no saben bien». Este piensa que, «tenemos que salir de este pensamiento posmodernista, irracional subjetivo, y regresar a la idea de que es bueno estar informado—saber en verdad que es lo que está pasando, cual es la evidencia».

Exactamente eso es lo que estimulamos dentro de las páginas de Visión al igual que en visionjournal.es. Aquí encontrará muchos artículos, libros, videos, inclusive un curso de estudio dedicado a vencer la ignorancia bíblica. No es suficiente decir «No creo en Dios porque no se nada sobre Él», así como tampoco es suficiente decir «Soy un escéptico en cuanto a Dios porque no he leído o estudiado su libro».

Si usted quiere comenzar el proceso de descubrir en lo que muchos han confiado por siglos, así como la narrativa que es fundamental a la civilización occidental, investigue el término «Biblia y Religión» en www.visionjournal.es.